El profesor continuo—Si Dios creo todo, entonces Dios es malvado, puesto que existe la maldad. Por lo tanto, de acuerdo al principio que lo que hacemos define QUIENES somos; entonces, Dios es…o tiene la capacidad de ser…malo. —
El estudiante se quedó callado y pensativo.
El profesor sonrió, satisfecho porque una vez más había comprobado que la creencia en un Dios amoroso era un mito.
Otro estudiante levantó su mano y dijo—Profesor, ¿me permite una pregunta?
—Adelante—contestó el profesor, ansioso de seguir con su victoria.
—Profesor, ¿existe el frío?
— ¿Nunca has sentido el frío? le respondió el profesor. — ¡Claro que existe el frío!—Algunos estudiantes se rieron de la pregunta del estudiante.
El joven continuo, –Pero profesor, la realidad es que el frío NO existe. De acuerdo a las leyes de la física, lo que nosotros consideramos como el frío en realidad es la ausencia del calor. Cada entidad u objeto puede ser estudiado cuando trasmite energía, y el CALOR es lo que hace que la material o cuerpo trasmita energía. Cero absoluto (-273 Co) es una ausencia total del calor; toda material se hace inerte e incapaz de reaccionar a tal temperatura.
El frío no existe. Nosotros creamos esta palabra para describir cómo nos sentimos cuando no hay calor.
El estudiante continuo—Profesor, ¿existe la oscuridad?
El profesor titubeó, luego respondió— ¿La oscuridad? Sí, si existe.
El estudiante respondió—Señor, la oscuridad no existe tampoco. La oscuridad es la ausencia de luz. Estudiamos la luz, pero no la oscuridad. Es más, podemos usar el prisma de Newton para separar la luz blanca en muchos colores y estudiar las ondas de cada color. Pero, no medimos la oscuridad. Un solo rayo de luz puede penetrar en un mundo de oscuridad e iluminarlo. ¿Cómo sabemos cuánta oscuridad hay? Medimos la cantidad de luz presente. No podemos medir la cantidad de oscuridad. Oscuridad es la palabra que usamos para describir lo que sucede cuando no hay luz presente.
Y siguió el joven—Y, Señor, la MALDAD no existe.
Ahora ya no tan seguro de sí, el profesor respondió–¡Claro que sí existe! Todos los días presenciamos la maldad. Es un ejemplo diario de la inhumanidad del hombre. Es el crimen y la violencia en todo el mundo entero. Estas manifestaciones son prueba de que la maldad existe.
El estudiante respondió—Señor, la maldad no existe. Bueno, no existe como entidad propia. ¡La maldad es la ausencia de DIOS! Es como el frío, la oscuridad, una palabra que existe para describir lo que es la ausencia de Dios. Dios NO creo la maldad. La maldad no es como la fe, o el amor, tales sí existen, así como la luz y el calor. La maldad es lo que sucede cuando el hombre no tiene el amor de Dios en su corazón. La Biblia asegura que Dios es amor. La maldad es como el frío que llega cuando no hay calor o la oscuridad cuando no hay luz.
El profesor se quedó mudo y se sentó.
…El joven quien aceptó el reto fue Alberto Einstein.