INTRODUCCIÓN
Admirad, queridos hermanos, el poder de la gracia divina. ¡Qué maravillosa y rápida transformación realiza en el hombre!
Al mismo Pedro, que seguía, aún ayer, de lejos a su Maestro y, lanzando imprecaciones, negaba que Le conociera, le vemos hoy declarando valerosamente, junto con el discípulo amado, que sólo en el nombre de Jesús pueden ser salvos los hombres y predicando la resurrección de los muertos por el sacrificio de su Señor crucificado.
Spurgeon
LA ENSEÑANZA DE LOS NIÑOS
Por Charles Spurgeon.
«Venid, hijos, oídme; en el temor de Jehová os instruiré» (Salmo 34:11).Es cosa singular que los hombres buenos frecuentemente descubran su deber cuando están situados en las más humillantes condiciones. Nunca en su vida estuvo David en peor apuro que el que le sugirió este Salmo. Es, como leemos al comienzo, «Salmo de David, cuando mudó su semblante delante de Abimelec, y él lo echó, y se fue.»
EL TRONO DE LA GRACIA
Texto: "Al trono de la gracia" Hebreos 4:16
Estas palabras se encuentran engastadas en aquel versículo lleno de gracia: "Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanazar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro." Son una gema en un engaste de oro. La verdadera oración es un acercamiento del alma por el Espíritu de Dios al trono de Dios. No es emitir palabras, no es solamente el sentir deseos, sino es la presentación de los deseos a Dios, el acercamiento de nuestra naturaleza a Dios nuestro Señor.
UN NUEVO COMIENZO
Amados compañeros de servicio en Cristo, nuestra labor exige que estemos en el mejor estado posible en nuestro corazón. Cuando estamos en la mejor de las condiciones, somos ya bastante débiles; por lo tanto, no quisiéramos caer por debajo de nuestro punto más elevado. Como instrumentos, debemos todo nuestro poder de servicio a la mano divina; pero, puesto que los instrumentos han de guardarse siempre en orden, deseamos tener el espíritu exento de herrumbre, y nuestra mente afinada y afilada para responder en seguida a la voluntad del Maestro.
Leer más »LUZ. FUEGO. FE. VIDA. AMOR.
Nunca he necesitado más ayuda que ahora, y nunca me sentí tan absolutamente inadecuado para dar la pauta a la Conferencia. A medida que aumentáis en número, en dones, y en experiencia, me doy cuenta cada vez más de lo poco digno que soy de estar en lugar destacado y de dirigir vuestras filas. Sin embargo, confiaré en Dios y creeré que, por su Santo Espíritu, Él enviará palabras de aliento.
CERTIFICADO DE EXITO DE LA ORACION
Por Charles Spurgeon
Texto: "Y yo os digo: Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá." Lucas 11: 9-10
Buscar ayuda de un ser sobrenatural en tiempo de angustia es un instinto de la naturaleza humana. No decimos que la naturaleza humana no renovada ofrezca una oración verdaderamente espiritual, o pueda ejercer la fe salvadora en el Dios vivo.
El Don de Hablar Espontáneamente
Por Charles Spurgeon
No vamos a tratar la cuestión de sí los sermones deberán ser escritos y leídos, o escritos, aprendidos de memoria y reproducidos; O Si fuese mejor prescindir por completo de apuntes. No nos ocuparemos de ninguno de estos asuntos, si no es de un modo incidental, y pasaremos a considerar el don de hablar espontáneamente, en su forma verdadera y pura, es decir, el habla improvisada, lo que se profiere sin preparación especial, sin notas o pensamientos sugeridos, momentos antes, de predicar.
UN PUEBLO VOLUNTARIO
"Tu pueblo lo será de buena voluntad en el día de tu poder, en la hermosura de la santidad desde el seno de la aurora: tienes tu el rocío de tu juventud" (Salmo 110:3).
Jamás un versículo de las Escrituras me ha confundido tanto como éste para encontrarle significado y relación. Al leerlo rápidamente, a primera vista, puede parecer muy fácil; pero si se escudriña cuidadosamente se encuentra dificultad para ensartar las palabras o darles un significado inteligible.
LA ORACION ESPONTANEA
Texto: "Entonces oré al Dios de los cielos." Nehemías 2:4
Como ya vimos en la lectura de las Escrituras, Nehemías había preguntado en cuanto al estado de la ciudad de Jerusalén, y las noticias que oyó le causaron amargo dolor. "¿Cómo no estará triste mi rostro, cuando la ciudad, la casa de los sepulcros de mis padres, está desierta, y sus puertas consumidas por el fuego?" No podía soportar que fuera un puro montón de ruinas --aquella ciudad que había sido hermosa en cuanto a situación y el gozo de toda la tierra.
TIEMPO DE SIEGA
«¿No es ahora la siega del trigo?» (1ª Samue1 12:17).
No observaré el contexto aquí, sino que sencillamente tomaré estas palabras corno lema, y ni sermón se basará sobre un «campo de siega». Prefiero emplear la siega para un pasaje antes que cualquier pasaje que encuentre aquí. «¿No es ahora la siega del trigo?» Supongo que los moradores en las ciudades piensan menos en los tiempos y sazones que los habitantes del campo.