Dios amado te doy gracias por haberte fijado en mi, reconozco que solo tu mereces la honra y la gloria, porque reconozco que tu eres el Dios que llama no a los capacitados, sino mas bien capacitas a los llamados, Señor tu eres a través de tu palabra quien vuelve rema el accionar de tus hijos, por favor que tu Santo Espíritu conduzca, oriente y guíe lo que hoy quieres que comparta con mis hermanos, y que tu Santo Espíritu se manifieste en cada uno de los corazones que tú quisiste que estuvieran esta noche, gracias por manifestarte en nosotros, en el nombre de Jesús, Amén .
Muchos cristianos hacemos y otros deshacemos, ojalá que el tanto hacer como el deshacer sea para bien, es decir cuanto añades cada día a tu cuerpo y a tu alma para hacer mejor las cosas, pero también cuanto quitas a tu cuerpo y a tu alma para borrar las cosas que todavía son viejas son antiguas, son del pasado, son de malos recuerdos. En Cristo Jesús todas las cosas son hechas nuevas.
Lo primero que debemos entender es que uno vive de acuerdo a lo que piensa, la escritura declara en Proverbios 23:7 que “como piensa dentro de si la persona, así es”,
El tema de hoy es EL CAMBIO INTERIOR.
Hermano no esperes que las cosas que tienes a tu alrededor cambien, si todavía tu tienes muchas cosas que cambiar. Recuerda que muchas de las cosas sobre las cuales tu esperas un cambio, dependen de qué puedes hacer tu o yo.
Dale rema a la palabra de Dios, permite que entre por el oído, baje al corazón (que acá revolucione, que se haga tuyo), luego que suba a la mente y se manifieste por la boca. pero esa manifestación que sea con acción. De la abundancia del corazón habla la boca (Lucas 6:45).
La palabra nos exhorta a que debemos vivir una vida victoriosa como la de nuestro Señor, y para eso debemos pensar como él pensaba, que bendición saber que en 1 Corintios 2:16 la palabra declara que tenemos acceso a la mente de Cristo, es decir, esta a nuestra disposición para que podamos vivir una vida igual que la suya, pero esto solo lo lograremos a través de meditar y poner por obra su palabra. En la medida que meditamos en la palabra y la ponemos por obra, la vida de Cristo se empieza a manifestar en la nuestra, y pasamos de ser unos perdedores a ser unos victoriosos, pasamos de ser cola, a ser cabeza, pasamos de pedir, y empezamos a dar, pasamos de pedir prestado, a prestar, y en cada situación de la vida empezamos a dar gloria a Dios sabiendo que todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios. Amado hermano, tú eres un hijo de Dios, no dejes que el diablo te diga lo contrario.
Muchos esperamos cambios en nuestro alrededor, pero como vamos a tener esos cambios, si tales cambios dependen de nosotros, por ejemplo algunos podemos decir:
ü “cuando dejaremos de comer lo mismo” y este que dice esto a lo mejor nunca a trabajado.
ü “cuando se *****plirán las promesas de Dios para mi vida” y este que dice esto probablemente está esperando que llueva mana del cielo, es decir, no habla con Dios a través de la oración o probablemente si lo haga, pero no hace no actúa para buscar esas promesas de Dios
ü “que pasa que no me aumentan el sueldo” y este que dice esto no se sacrifica por mejorar los resultados de su trabajo.
ü “que pasa porque no vendo mas” y este que dice esto no busca mercados competitivos, no usa la creatividad que es la creación de Dios en su mente
ü “porque mi ministerio no crece” y este que dice esto no hace mas de lo que Dios espera conforme a los talentos que se le han dado.
No hermano lo que debemos de hacer es un alto por un momento y comenzar a observar y reflexionar sobre que cosas estoy haciendo bien y que cosas estoy haciendo mal que necesito mejorar.
Pero que cosas necesitamos cambiar? Bueno, necesitamos cambiar pensamientos, sentimientos y actitudes, es decir primero comenzamos por las cosas que llegan a nuestra mente y luego las que llegan a nuestro cuerpo, por ejemplo:
· No esperemos panes y peces; mejor convirtámonos en pescadores.
· No luches solamente por crecer; mejor esfuérzate por reproducirte.
· No gustes del halago; conviértete en un sacrificio vivo para Cristo Jesús.
o No entreguemos parte de nuestras ganancias; mejor entreguemos parte de nuestras vidas (y vida es todo, entrega, tiempo, diezmo, ofrenda).
o No caigamos en la rutina en la religiosidad; mas bien seamos cada día renovados para que el Espíritu Santo se manifieste en nuestras vidas personales y en la congregación.
o No esperes que te animen; procura animar.
o No esperes que te asignen tarea; el autentico cristiano es solícito en asumir responsabilidades.
o No murmuremos y reclamemos; mejor obedezcamos y neguémonos a nosotros mismos.
o No seamos hombres y mujeres condicionados por las circunstancias; lo mejor es aprovechar las circunstancias para ejercer nuestra fe.
o No reclames porque no te visitan y pastorean, mas bien participa de la visión de esta iglesia y únete a los G-12 y células evangelistas
o No solamente busquemos en la Palabra promesas para nuestras vidas; mas bien busquemos vida para *****plir las promesas de la Palabra.
o No solamente nos sentemos para adorar a Dios; mejor andémosle adorando siempre
o Como cristianos no solamente valgamos para sumar (no seamos uno mas); mas bien debemos emprender nuestra tarea para multiplicar.
o No nos conformemos con esperar milagros; mas bien trabajemos para obrar milagros.
o No nos conformemos con llenar el templo; vamos mas allá para conquistar el mundo.
o Dejemos de cuidar de las estacas de nuestra tienda; mejor trabajemos para ensanchar el sitio de nuestra tienda . Recuerda el 2004 año de la expansión
o No nos conformemos con el sueño de la iglesia ideal; mas bien entreguemosnos para lograr la iglesia real.
o Que nuestra meta no sea solamente ganar el cielo; más bien que nuestra meta sea ganar almas para el cielo.
o No esperemos un avivamiento genuino del Espíritu Santo; lo mejor es que desde ya seamos parte del derramamiento del Espíritu Santo.
o No debemos ser socios de esta congregación, mas bien debemos ser siervos útiles a Dios y a nuestro prójimo.
o No permitamos enredarnos con la cizaña; mas bien es necesario superar las escaramuzas del diablo y no dejarse confundir.
o No basta con el «ojalá»; debemos estar dispuestos para el «Heme aquí.»
o No solamente prediquemos el Evangelio; vamos mas allá y hagamos discípulos.
o No esperemos recompensa para dar; mas bien demos para ser recompensados.
o No esperemos que siempre oren por nosotros; mas bien, oremos por los demás.
o No solamente debemos congregarnos para encontrar al Señor; mas bien, debemos traer la presencia del Espíritu Santo.
Nuestra mente es como un supermercado, entran y salen pensamientos y si no tenemos cuidado podemos ser sorprendidos por el enemigo.
Recuerda que la mente es el campo de guerra espiritual y si no hay cambios restauradores en ella Cualesquiera que sean tus pensamientos
dominantes hoy, así será tu vida mañana.
Todo lo que hacemos inicia con un pensamiento, no importa si es el suicidio, adulterio, robo o adicción. Cualesquiera que sean nuestros pensamientos dominantes hoy, serán nuestra vida mañana.
Necesitamos monitorear lo que estamos viendo, escuchando y leyendo. No podemos mirar la mayoría de programas en la TV. y tener pensamientos sanos.
Romanos 12:2
«No os conforméis a este mundo; más bien, transformaos por la renovación de vuestro entendimiento, de modo que comprobéis cuál sea la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta».
en la versión Dios Habla Hoy dice, “cambien su manera de pensar para que así cambien su manera de vivir”
Este pasaje hace claro que necesitamos tener una transformación en nuestra vida.
Muchas veces hemos pensado que si tan solo oramos bien o por suficiente tiempo, nuestros problemas se irán.
La oración es buena, la oración es esencial, pero eso no cambia nuestras acciones, eso debe de comenzar con la renovación de la mente nuestra.
Mateo 7:7,8 Pedid, y se os dará; buscad y hallaréis; llamad, y se os abrirá.
Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.
Filipenses 4:8
«En cuanto a lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si hay algo que merece alabanza, en esto pensad».
Lo que de verdad necesitamos es pensar los pensamientos de Dios, y los pensamientos de Dios los encontramos en su santa palabra.
En el Salmo 73 Está el salmista desanimado por lo que ve en el mundo alrededor de el y comienza a pensar en lo que podríamos llamar «pensamientos sucios». Pero cuando entró en el Santuario y empezó a meditar en la Palabra de Dios, su manera de pensar cambio.
Cada pensamiento de Dios tiene el poder para cambiarnos. Hay poder en su Palabra.
El meditar en las escrituras,
llena la mente con los
pensamientos correctos
Con una mente renovada en la Palabra seremos transformados en lo que Dios ha designado desde siempre para nosotros, para la vida nuestra. Cuando meditamos en la Palabra de Dios, su paz guarda la mente y corazón nuestro. Una mente guardada que siempre piensa los pensamientos de Dios, será bendecida con una vida prospera, tal como lo dice en Josué 1:8 “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien
Recuerda que LA BIBLIA ES LA PALABRA DE DIOS INSPIRADA POR EL ESPIRITU SANTO
LA BIBLIA CONTIENE LAS NORMAS MÁXIMAS DE FE Y CONDUCTA
LA BIBLIA ES LA RESPUESTA A TODO TIPO DE PREGUNTA DEL SER HUMANO
ü El que sabe lo que quiere, los medios para triunfar le sobran; pero como? Conviértete en un hombre/mujer bueno y el mundo será mejor.
Mira hermano, antes de cambiar a otro o a otros comienza cambiando tu propio ser, recuerda que todos necesitamos quitar de nuestra mente los malos deseos, los malos pensamientos, pero todos necesitamos poner en nuestra mente la palabra de Dios que es vida, porque entonces encontramos la buena, perfecta y agradable voluntad de Dios, pero solamente lo puedes lograr a través de la renovación de tus pensamientos, sentimientos y actitudes.
YA NO SIGAS SIENDO EL MISMO CAMBIA PARA MEJORAR TU Y LOS TUYOS, TU Y LOS QUE TE RODEAN.
SI TIENES OIDOS PARA HACER DE TI REMA ESTA PALABRA, QUE EL SEÑOR TE AYUDE A TRANSFORMAR Y CAMBIAR TU INTERIOR PARA BENDICIÓN DE TU PERSONA Y DE TODO LO QUE ESTA A TU ALREDEDOR.
Vamos a orar.
Gracias Señor por tu palabra, ayúdanos a ser renovados, a ser transformados, queremos ser hombres y mujeres que huyen de las cosas malas, de las cosas que no son agradables a ti, queremos seguir y alcanzar la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre; arranca de cada uno de nosotros ese espíritu de cobardía y como dice tu palabra danos poder, amor y dominio propio.
Que tu Santo Espíritu nos llene cada día, de cada hora, de cada minuto y de ser posible de cada segundo, para que continuamente seamos transformados y renovados, porque queremos alcanzar Tu buena, perfecta y agradable voluntad Señor, ten misericordia de todos nosotros y ayúdanos a llevar una vida de bendición, de paz, de tranquilidad, de gozo, de amor, de bondad; ayúdanos a ser rema tu palabra, que tu palabra llegue a nuestro corazón, que acampe ahí, que transforme ahí, que renueve y cambie este corazón para que siempre este limpio de pecado, limpio de cualquier adversidad, limpio para que no llegue la angustia, limpio para que no llegue la desesperación; principalmente te pedimos que nos aumentes la fé y que nos revistas del poder y la fuerza de tú Santo Espíritu.
Quita de nosotros cualquier situación que atormente nuestras vidas, quita de nosotros todo pecado, arranca de nosotros esas situaciones que no nos ayudan a bien, arranca esta noche esos pensamientos, sentimientos y actitudes que el enemigo a puesto, quitamos resentimientos, odios, rencores, pensamientos de avaricia, fornicación, adulterio, ira, maltrato y mas bien llenanos de esa unción fresca, de esa unción que emana amor, en tu nombre Señor hemos orado y en tu nombre nos revestimos desde ya para que hoy y siempre seamos dignos de estar plenamente en tu presencia, porque somos tus hijos, porque somos tus siervos y queremos cada día alcanzar las promesas que tu tienes guardadas para todos y cada uno de nosotros en el nombre de Jesús. Amén
Cantar renuévame, Señor Jesús, ya no quiero ser igual, porque todo lo que hay dentro de mi corazón, necesita más de ti.
El es Jehová, tu Dios, tu sanador….canta aleluya, canta aleluya.
Recopilado y adaptado por:
Elmer Antonio Castellanos
IFAELOHIM – El Salvador