Implica el ser pionero, o sea, ir por lugares por los cuales nadie ha ido en el pasado.
Emprender es iniciar algo sin que se vea nada, implica edificar todos desde los cimientos, es ver un terreno baldío y ver un gran edificio.
Emprender implica tener un proyecto, un plan de trabajo, con metas y objetivos; y llevarlo adelante.
Emprender involucra un desafío, un desafío de fe, a salir y empezar a hacer.
¿Cuáles son tus miedos?
Pero ¿cuáles son tus miedos? La respuesta a esta pregunta puede ser muy amplia, a continuación doy algunos ejemplos, pero sé que tú puedes agregar más a la lista.
* Miedo al fracaso; ya que emprender es hacer algo que no se ha hecho antes.
* Miedo a lo nuevo, a lo desconocido, el famoso temor a los cambios. Lo nuevo asusta. Uno de los frenos del emprendedor es el temor a lo desconocido, ya que lo nuevo asusta, por eso el miedo a los cambios, pero Dios nos está llamando a cruzar la barrera del temor y aceptar los desafíos que se presentan, los cambios son buenos; aunque muchas veces duelan –recuérdese el periodo de la adolescencia, ese estiramiento que se produce en el cuerpo y por el cual los adolescentes pasan por un periodo de adaptación- y en ellos se crecen.
“Mas los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo porque es más fuerte que nosotros.
También vimos allí a los gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos”. Nm. 13:31, 33.
* Miedo a la incomprensión de los que no entienden al emprendedor, el qué dirán. No es de extrañar que siempre se levanten los que opinan de todo sin saber nada, aquellos que “le ponen el palo a la rueda”.
“Y oyéndolo hablar Eliab su hermano mayor con aquellos hombres, se encendió en ira contra David y dijo: ¿Para qué has descendido acá? ¿y a quién has dejado aquellas pocas ovejas en el desierto? Yo conozco tu soberbia y la malicia de tu corazón, que para ver la batalla has venido.
Dijo Saúl a David: No podrás tú ir contra aquel filisteo, para pelear con él; porque tú eres muchacho, y él un hombre de guerra desde su juventud”. 1ª Sa. 17:28, 33.
* Miedo al no puedo, al no tengo al no sé.
“Ahora, pues, haz pregonar en oídos del pueblo, diciendo: Quién tema y se estremezca, madrugue y devuélvase desde el monte de Galaad. Y se volvieron de los del pueblo veintidós mil, y quedaron diez mil”. Jue. 7:3.
“Y todos los varones de Israel que veían aquel hombre huían de su presencia, y tenían gran temor”. 1ª Sa. 17:24.
Salir del conformismo.
Es necesario salir del conformismo, el otro enemigo y mayor freno que se presenta al emprendedor.
El conformismo te lleva a quedarte como estás, a no querer salir de la situación ni progresar, el conformismo te estanca y te frena.
El conformismo detiene el crecimiento, se queda con la situación actual, la acepta como natural e incambiable.
Podemos decir, entonces, que el conformismo es una forma de resignación.
Dios no creó al hombre para que se conforme, para que se estanque, él lo creó para que se desarrolle, para que se supere cada día ya que puso en él un gran potencial, como dice el libro Eclesiastés: “… y ha puesto eternidad en su corazón”.
Se cuenta que cuando se descubrieron las pirámides de Egipto en su interior encontraron tinajas con granos de trigo de más de 2000 años de antigüedad, los arqueólogos al ver este descubrimiento quisieron probar si las semillas todavía servían, entonces tomaron algunas y las sembraron.
Cuando estas entraron en contacto con la tierra y el agua, al tiempo comenzaron a germinar y dieron lugar a plantas que luego de algún tiempo se convirtieron en espigas de trigo, esas semillas habían guardado por más de 2000 años su potencial esperando que alguien las sembrara.
Este ejemplo nos enseña lo importante que es salir del conformismo, nosotros tenemos el potencial para ser emprendedores, no nos encerremos en un frasco de vidrio, sembrémonos en la buena tierra y produzcamos.
De hecho el mandato de Dios es el de superarnos y crecer más cada día.
Incluso el conformarse con lo bueno es malo, ya que Dios te llama para lo mejor, ya que lo mejor está por venir.
“… extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”. Fil. 3:13ª, 14.
“Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo”. 2ª Pe. 3:18.
Alguien dijo alguna vez que mediocre es aquel que pudiendo ir por lo mejor se queda con lo bueno, un pensamiento para reflexionar, ¿no es cierto?
Esto paso con las dos tribus y media, ellos vieron la tierra en la que estaban –una tierra en la cual estaban de paso, sólo para recobrar fuerzas y prepararse para entrar en la tierra prometida- y decidieron quedarse en y con ella, porque vieron que era más fácil detenerse allí que seguir adelante, y así lo hicieron, pero terminaron mal, porque al pasar el tiempo ellos fueron los primeros en ser destruidos.
Cuando Dios te diga que avances, ¡¡¡AVANZA!!!
Debemos siempre ir por más, por lo que está delante, proseguir a la meta.
El emprendedor.
El que decide ser emprendedor tendrá que entender que caminará por un lugar por el cual no hay camino, tendrá que ver las oportunidades que otros no pueden ver.
El emprendedor ira contra la corriente –como el salmón- tendrá que hacer frente al desaliento y al desanimo.
El emprendedor no deberá oír a los que dicen que no se puede.
El emprendedor no puede volverse atrás una vez que ha comenzado.
Nehemías es un ejemplo de un emprendedor, otros veían un caos, él veía la oportunidad de éxito.
Valoración, planificación, ejecución –desarrollo y consolidación- y evaluación.
El emprendedor valorara la situación, realizará un diagnostico de situación, se acercará a lo que quiere.
Determinará los recursos necesarios para llevar a cabo el emprendimiento e incluso determinará el tiempo estimado que le demandará hasta lograrlo.
Elaborará –en base a su valoración previa- un plan y planificará las tareas y estrategias a llevar a cabo.
El emprendedor llevará adelante el plan, ejecutará todo lo que ha ideado, llevará a cabo la tarea.
Desarrollara el conjunto de estrategias.
Finalmente evaluará todo lo realizado y los objetivos alcanzados para ver si ha llegado a la meta que se había prepuesto, y una vez allí proseguirá por más.
Las características del emprendedor.
Es necesario que el emprendedor reúna las siguientes características:
* Ser una persona de carácter firme.
* Decidido a actuar, aún en situaciones extremas.
* Poseer convicciones firmes y seguras con el fin que se ha propuesto.
* Poseer un compromiso sólido con el emprendimiento.
* Ser estable y seguro.
* Ser esforzado y valiente. “Esforzaos y cobra ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará”. Dt. 31:6. “Esfuérzate, y esforcémonos por nuestro pueblo, y por las ciudades de nuestro Dios; y haga Jehová lo que bien le pareciere”. 2ª Sa. 10:12.
* El emprendedor no debe temer cruzar el Jordán, aunque éste esté desbordado por sus lados. Estos fueron capitanes del ejército de los hijos de Gad. El menor tenía cargo de cien hombres, y el mayor de mil. Estos pasaron el Jordán en el mes primero, cuando se había desbordado por todas sus riberas; e hicieron huir a todos los de los valles al oriente y al poniente(1ª Cro. 12:14-15).
* El emprendedor se levantará en medio de la crisis. “Levántate, porque esta es tu obligación, y nosotros estaremos contigo; esfuérzate, y pon manos a la obra”. Esd. 10:4.
* El emprendedor ha recibido un espíritu diferente de parte de Dios, ha salido de temo y de la cobardía, del no puedo, del no tengo, del no sé y del no me meto. “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”. 2ª Ti. 1:7.
* El emprendedor es un pionero, una persona que inicia una actividad completamente nueva y sirve de indicador a aquellos que intentarán hacer los mismo después.
Teniendo en cuenta esto último, veamos los siguientes términos:
* Emprender: comenzar una obra o empresa.
* Emprendedor: que toma la iniciativa.
* Iniciativa: idea inicial para emprender algo. Cualidad del que suele tener estas ideas.
* Empresa: acción dificultosa que se comete con resolución(decisión, determinación).
David era un emprendedor. Un emprendedor, teniendo en cuenta todo lo anterior, es un referente, es alguien que marca la diferencia, que sirve de ejemplo y de inspiración para otros. David era todo eso.
Cuando el pueblo fue puesto en apuros por Saúl, David trajo alivio y liberación, este David era quien animaba al pueblo, y el pueblo le seguí porque veía en él algo diferente que no veía en Saúl, David iba la frente, no atrás, los sacaba y los volvía a entrar.
“Y salía David a dondequiera que Saúl le enviaba, y se portaba prudentemente. Y lo puso Saúl sobre gente de guerra, y era acepto a los ojos de todo el pueblo, y los ojos de los siervos de Saúl”. 1ª Sa. 18:5.
“Mas todo Israel y Judá amaba a David, porque él salía y entraba delante de ellos”. 1ª Sa. 18:16.
“Y salieron a campaña los príncipes de los filisteos; y cada vez que salían, David tenía más éxito que todos los siervos de Saúl, por lo cual se hizo de mucha estima su nombre”. 1ª Sa. 18:30.
Es interesante destacar que desde el principio Saúl sabía que David sería el verdadero rey de Israel, pues desde el momento en que desobedeció la palabra de Dios, él se proveyó de un nuevo rey, o sea, David.
“Mas ahora tu reino no será duradero. Jehová se ha buscado un varón conforme a su corazón, al cual Jehová a designado para que sea príncipe sobre su pueblo, por cuanto tú no has guardado lo que Jehová te mandó”. 1ª Sa. 13:14.
“Y le dijo: No temas, porque no te hallará la mano de Saúl mi padre, y tú reinarás sobre Israel, y yo seré segundo después de ti; y aun Saúl mi padre así lo sabe”. 1ª Sa. 23:17.
“Y ahora, como yo entiendo que tú has de reinar, y que el reino de Israel ha de ser en tu mano firme y estable”. 1ª Sa. 24:20.
“Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda emprenderás tú cosas grandes y prevalecerás”. 1ª Sa. 26:25ª.
El reino de David creció por esto, y vemos aún más, ya que si analizamos bien el libro de 1ª Crónicas veremos que es prácticamente un detallado resumen del reino de David, en el se nos muestra todas las medidas que el llevó a cabo para desarrollar y consolidar el reino y llevarlo a ser el mayor de sus tiempos, llegando sus limites a su máxima extensión.
Podemos afirmar, sin temor a equivocarnos que el templo de Salomón –si bien es cierto que este lo edifico- fue emprendido por el mismo David, ya que el reino de Salomón se desarrollo bajo el impulso del de su padre.
“Y David dio a Salomón su hijo el plano del pórtico del templo y sus casas, sus tesorerías, sus aposentos, sus cámaras y la casa del propiciatorio.
Asimismo el plano de todas las cosas que tenía en su mente para los atrios de la casa de Jehová, para todas las cámaras alrededor, para las tesorerías de la casa de Dios, y para las tesorerías de las cosas santificadas.
También para los grupos de los sacerdotes y de los levitas, para toda la obra del ministerio de la casa de Jehová, y para todos los utensilios del ministerio de la casa de Jehová.
Todas estas cosas, dijo David, me fueron trazadas por la mano de Jehová, que me hizo entender todas las obras del diseño”.
1ª Cro. 28:11-13, 19.
Nótese cuidadosamente que todo estaba preparado antes de que el príncipe fuera coronado rey, léanse los capítulos 22 al 29 de 1ª Crónicas.
1ª Crónicas 11:9. “Y David iba adelantando y creciendo, y Jehová de los ejércitos estaba con él”.
“Comenzó Salomón a edificar –emprender- la casa de Jehová en Jerusalén, en el monte Moriah, que había sido mostrado a David su padre, en el lugar que David había preparado en la era de Ornán Jebuseo. Y comenzó a edificar en el mes segundo, a los dos días del mes, en el cuarto año de su reinado”. 2ª Cro. 3:1-2.
Jabes de Galaad, un hombre que se atrevió a ser diferente y a emprender algo diferente a pesar de su condición.
“Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: por cuanto lo di a luz en dolor(Heb. Oseb, dolor; esta es la misma raíz de la cual proviene Job).
E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió(1ª Cro. 4:9-10).
* El emprendedor sabe que el camino no será fácil, que será un camino de trabajo, que no habrá tiempo de descansar.
* El emprendedor no tiene tiempo para mirar hacia atrás.
* El emprendedor se toma tiempo para planificar(Lc. 14:28-32).
“Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?
No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a hacer burla de él,
Diciendo: Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar.
¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil?
Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos, le envía una embajada y le pide condiciones de paz.
* El emprendedor no actúa por impulso o por emoción, actúa en base a un plan establecido.
* Pero si hay problemas sabe tomar decisiones de último momento, pero esto no quiere decir que sea un improvisado(1ª Cro. 19:17-18).
“Luego que fue dado aviso a David, reunió a todo Israel, y cruzando el Jordán vino a ellos, y ordenó batalla contra ellos. Y cuando David hubo ordenado su tropa contra ellos, pelearon contra él los sirios.
Mas el pueblo sirio huyó delante de Israel; y mató David de los sirios a siete mil hombres de los carros, y cuarenta mil hombres de a pie; asimismo mató a Sofac general del ejército”.
* El emprendedor siempre está preparado, siempre está listo.
* El emprendedor es diligente.
* El emprendedor siempre toma la iniciativa.
* El emprendedor es líder.
* El emprendedor va delante.
* El emprendedor se levanta en el tiempo de crisis(Jue. 5:6-7, 10:1-5).
“En los días de Samgar hijo de Anat,
En los días de Jael, quedaron abandonados los caminos,
Y los que andaban por las sendas se apartaban por senderos torcidos.
Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído,
Hasta que yo Débora me levanté,
Me levanté como madre en Israel”.
“Después de Abimelec, se levantó para librar a Israel Tola hijo de Fúa, hijo de Dodo, varón de Isacar, el cual habitaba en Samir en el monte de Efraín.
Tras él se levantó Jair galaadita, el cual juzgó a Israel veintidós años”.
* El emprendedor no mira sus limitaciones pues sabe que Dios es poderoso para superarlas.
Ejemplo de esto fue Aod, éste fue un juez de Israel. Aod tenía la característica de ser zurdo, para nosotros esto no representa nada, pero en los tiempos de los jueces el hecho de ser zurdo representaba una gran desventaja, pues todas las armas eran confeccionadas para las personas diestras, además, los zurdos eran considerados como malas personas, traicioneros. Pero Aod era un juez levantado por Dios.
Mientras que el pueblo lo enviaba con presentes para quien los había sojuzgado, Aod, como emprendedor, tenía un plan, él se había dedicado a idear una estrategia y a emplear el hecho de ser zurdo para llevarlo a cabo.
El llevo a cabo su plan en el momento justo para la acción, y el resultado fue sorprendente: la liberación(Jue. 3:15-16, 30).
“Y clamaron los hijos de Israel a Jehová; y Jehová les levantó un libertador, a Aod hijo de Gera, benjamita, el cual era zurdo. Y los hijos de Israel enviaron con él un presente a Eglón rey de Moab.
Y Aod se había hecho un puñal de dos filos, de un codo de largo; y se lo ciñó debajo de sus vestidos a su lado derecho”.
* El emprendedor no cae presa del afán y la ansiedad.
* El emprendedor se une a quienes le ayudarán a desarrollar su proyecto. “El que anda con sabios, sabio será; mas el que se junta con necios será quebrantado”. Pr. 13:20. Un enano ve poquito porque es bajo; un gigante ve mucho más, porque es grandote, pero, ¿Qué pasa si el enano se sube a los hombros del gigante?… Vera incluso más que el propio gigante. Alejandro magno fue tan grande, porque su papá, le puso como maestro un hombre que no era ni más ni menos que Aristóteles. Obviamente de ahí nació la grandeza de Alejandro Magno. Siguiendo su ejemplo, nosotros debemos buscar a los hombres y mujeres de 10(diez) y utilizarlos como punto de referencia para que sea nuestro 0(cero): busquemos a los mejores, este es el gran secreto del éxito: «Aprender de los triunfadores». Recordemos el refrán: » El que anda con lobos, a aullar se enseña». Procuremos, entonces, rodearnos de triunfadores, buscar como maestros a los mejores para que ellos sean precisamente los que nos conduzcan al éxito, y recordando siempre que para poder aprender del éxito se requiere un concepto esencial que de no existir impediría nuestro aprendizaje: la humildad para aprender. «El que anda con necios necio será mas el que anda con sabios sabio será».
* El emprendedor sabe cuando callar y cuando hablar, además, de con quien(Neh. 2:11-12, 16-19).
“Llegué, pues, a Jerusalén, y después de estar allí tres días,
me levanté de noche, yo y unos pocos varones conmigo, y no declaré a hombre alguno lo que Dios había puesto en mi corazón que hiciese en Jerusalén; ni había cabalgadura conmigo, excepto la única en la que yo cabalgaba.
Y no sabían los oficiales a dónde yo había ido, ni qué había hecho; ni hasta entonces lo había declarado yo a los judíos y sacerdotes, ni a los nobles y oficiales, ni a los demás que hacían la obra.
Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios había sido buena sobre mí, y asimismo las palabras que el rey me había dicho. Y dijeron: Levantémonos y edifiquemos. Así esforzaron sus manos para bien.
* El emprendedor busca consolidar su proyecto y desarrollarlo, y una vez logrado no se desvía ni descuida, sino que busca crecer más, como las plantas crecen toda su vida. El emprendedor nunca abandonará el plan de Dios, no dejará la visión(2ª Cro. 12:1). “Cuando Roboam había consolidado el reino, dejó la ley de Jehová, y todo Israel con él.
* El emprendedor con una mano trabaja en la obra y con la otra sostiene la espada.
* El emprendedor no ignora las maquinaciones del adversario y toma medidas contra él.
* El emprendedor no camina por vista, sino que camina por fe, porque siempre la realidad será contraria a lo que Dios dice que hagamos.
“Porque por fe andamos, no por vista”. 2ª Co. 5:7.
* El emprendedor no sólo trabaja para el ahora, sino que trabaja a futuro, pues posee visión de futuro, por la fe se extiende y avanza hacia lo que esta delante.
“Dame, pues, ahora este monte, del cual habló Jehová aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y que hay ciudades fortificadas. Quizá Jehová estará conmigo, y los echaré, como Jehová a dicho”. Jos. 14:12.
“… por fe conquistaron reinos, hicieron justicia, alcanzaron promesas, taparon bocas de leones”. He. 11:33.
Todo lo que emprende prosperará.
Para que seas prosperado en todo las cosas que emprendas.
Josué, como Nehemías, tenía que encarar un emprendimiento grande, llevar a un pueblo a conquistar una tierra.
Esta no era tarea de un solo día.
¿Cómo será esto?
¿Cómo lo hago? ¿Cómo será esto? A esta altura estas deben ser las preguntas que han de estar pasando por tu mente.
Todo será hecho por la guía y la gracia de Dios –esto no quiere decir que no vas a tener que trabajar, hacer tu parte, todo lo contrario, la gracia trabajará en tu vida para que tú trabajes- por revelación y por milagros.
* El emprendedor conoce a Dios y sabe que lo que hace –emprende- es de Dios. Es Dios quien lleva al emprendedor a cada paso, a cada nivel.
* El emprendedor recibe las directrices de Dios. Josué tenía todo lo que debía hacer porque Moisés había dejado esto escrito de parte de Dios.
* El emprendedor debe escribir la visión, esto es fundamental(Hab. 2:2). “Y Jehová me respondió, y dijo: Escribe la visión, y declárala en tablas, para que corra el que leyere en ella”.
* El emprendedor va con lo que tiene en su mano, porque es lo que Dios le ha dado.
Moisés tenía una vara. “Y Jehová dijo: ¿Qué es eso que tienes en tu mano? Y él respondió: Una vara. Y tomarás en tu mano esta vara, con la que harás las señales”(Ex. 4:2, 17).
Cuán insignificante puede parecer un pedazo de un árbol –una vara- en la mano de Moisés, desde luego que él nunca pensó que con eso Dios lo podía usar. Moisés no tenía posesiones, él era sólo un empleado de su suegro, Jetro, es decir, *****plía órdenes y horario de trabajo que consistía en cuidar y pastorear el ganado de éste.
Un trabajo simple, un hombre simple.
Un campo de trabajo aislado y desértico.
Una vara que tal vez estaba tirada en el suelo.
Probablemente te encuentres en la situación de Moisés y puedas estar pensando en cuán insignificante es tu vida o quieres emprender algún negocio, ministerio o proyecto y reflexionas y ves que no tienes dinero, recursos, talentos, apoyo…
Dios te dice, como le dijo a Moisés: ¿Qué tienes en tu mano?
Solamente piensa en cómo y dónde han comenzado los grandes empresarios, los grandes ministerios, los grandes proyectos…
¿Con cuánto contaban?
Así te darás cuenta que con Él tienes recursos para lograr tus objetivos.
1. Dios nos quiere usar para *****plir Su propósito.
2. Dios no pide de ti que tengas dinero ni posesiones materiales.
3. Dios suple en tu andar diario lo que te haga falta.
Gedeón tenía su fuerza. “Y mirándole Jehová, le dijo: Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo?(Jue. 6:14).
David tenía una honda, cinco piedras y un palo. “Y tomó su cayado en su mano, y escogió cinco piedras lisas del arroyo, y las puso en el saco pastoril, en el zurrón que traía, y tomó su honda en su mano, y se fue hacia el filisteo”(1ª Sa. 17:40).
La viuda tenía sólo una vasija de aceite. Pero sépase que no cualquiera tenía aceite en la antigüedad, porque este era muy estimado, por eso cuando Dios lo multiplica ella puede venderlo y salir de sus deudas. “Y Eliseo le dijo: ¿Qué te haré yo? Declamaré qué tienes en casa. Y ella dijo: Tu sierva ninguna cosa tiene en casa, sino una vasija de aceite”(2ª Re. 4:1-7).
La reina Ester tenía sólo una cena. “Y Ester dijo: Si place al rey, vengan hoy el rey y Amán al banquete que he preparado para el rey”(Est. 5:4).
El niño sólo tenía cinco panes y dos peces. “Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos?
El emprendedor de Dios es prosperado.
Veamos algunos ejemplos de emprendedores que alcanzaron prosperidad:
* José(Gn. 39:3).
“Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio.
Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él emprendía –hacía -, Jehová los hacía prosperar en su mano”.
* Ezequiel(2ª Cro. 31:21, 32:30).
“En todo cuanto emprendió en el servicio de la casa de Dios, de acuerdo a le ley y los mandamientos, buscó a su Dios, lo hizo de todo corazón, y fue prosperado”.
“Este Ezequiel cubrió los manantiales de Gihón la de arriba, condujo el agua hacia el occidente de la ciudad de David. Y fue prosperado Ezequías en todo lo que emprendió –hizo-“.
2ª Reyes 18:7. “Y Jehová estaba con él; y adondequiera que salía, prosperaba. El se rebeló contra el rey de Asiria, y no le sirvió”.
* Asa.
“Dijo, por tanto, a Judá: Edifiquemos estas ciudades, y cerquémoslas de muros con torres, puertas y barras, ya que la tierra es nuestra; porque hemos buscado a Jehová nuestro Dios; le hemos buscado, y él nos ha dado paz por todas partes. Edificaron pues, y fueron prosperados. 2ª Cro. 14:7.
* Salomón.
“Dijo además David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová”. 1ª Cro. 28:20.
“Y se sentó Salomón por rey en el trono de Jehová en lugar de David su padre, y fue prosperado; y le obedeció todo Israel”. 1ª Cro. 29:23.
2ª Crónicas 1:1. “Salomón hijo de David fue afirmado en su reino, y Jehová su Dios estaba con él, y lo engrandeció sobremanera.
Terminó, pues Salomón la casa de Jehová, y la casa del rey; y todo lo que se propuso emprender –hacer- en la casa de Jehová, y en su propia casa, fue prosperado. 2ª Cro. 7:11.
Consejos de Dios para el emprendedor.
El salmo 37 es a mi entender un listado de los consejos de Dios para quien desea ser un emprendedor.
* No impacientarse.
* No tener envidia.
* Confiar en Dios y hacer el bien. Esto es hacer lo que Dios le ha indicado.
* Deleitarse –gozarse- en Dios.
* Encomendar a Dios su camino.
* Guardar silencio ante él y esperar en Dios.
* Guardar el corazón, dejar el enojo, la ira, no alterarse, no pelear con armas humanas.
Pero ¿emprender en qué?
* En nuestros estudios.
* En nuestra profesión y/o ocupación.
* En nuestra economía.
* En nuestra familia.
* En nuestra vida.
* En nuestro ministerio.
El que es emprendedor, lo es todas las áreas de su vida, porque sino no lo es –y esto no es un juego de palabras ni un trabalenguas- no se puede ser emprendedor sólo en un área, eso es un concepto erróneo, ya que hay personas que se dedican sólo a lo espiritual –y no estoy diciendo que no haya que ocuparse del espíritu para ocuparse de la carne, sépase interpretar- y descuidan las otras áreas.
Así por ejemplo, tenemos jóvenes cristianos que son muy espirituales, pero cuyo nivel en sus estudios deja mucho que desear –porque son muy bajos o porque inician sus estudios y los dejan por la mitad- Dios no quiere esto.
El emprendedor, el que es en verdad emprendedor –que pertenece a la nueva generación- no hace esto, el hijo de Dios marca la diferencia, es llamado a ser cabeza y no cola, estar arriba y no abajo, ser primero y no último(Dt. 28:13), pero lamentablemente los cristianos, muchas veces, son los peores –en el estudio y en el trabajo- o siempre andan “zafando” con lo justo; y esto no puede ser así porque ¿Dónde está tu testimonio? ¿Dónde está tu luz?
Conclusión.
Y ¿tú dónde estás?
Dios quiere que seamos emprendedores, que seamos sabios para actuar y emprender aquellos que él nos ha mostrado.
José es el ejemplo para nosotros, este hombre tuvo la tarea de emprender algo enrome, con un propósito: proveer alimento y preservar la vida del pueblo de Dios.
El emprendedor bendice a otros. El emprendedor es levantado por Dios para bendecir su obra.
Es interesante destacar que el emprendedor debe actuar y moverse en el sentido de la palabra de Dios, para esto hay que buscar a Dios, ya que en su presencia es donde se recibe todo lo que se necesita para poder lograr el *****plimiento y obtención de la empresa.
Eres el Josué de esta generación, Dios te ha levantado para que seas emprendedor, esfuérzate y se muy valiente para poner en práctica todo lo que Dios te ha dicho y él ha de prosperar todo lo que emprendas.
“Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas”.
Jos. 1:7.
Queda aún mucha más tierra por poseer. Cuando Josué envejeció, Dios, le hizo saber que aún quedaba mucho por conquistar y poseer; eso mismo te dice a ti, lo que tú no poseas ahora lo harán tus descendientes, sólo que tú debes guiarlos a ser poseedores y emprendedores.
“Siendo Josué ya viejo, entrado en años, Jehová le dijo: Tú eres ya viejo, de edad avanzada, y queda aún mucha tierra por poseer”.
Jos. 13:1.