Y es así: 27 de septiembre, hay sesiones para los sacerdotes confesores, 4 de octubre se hacen amplios ritos, días 21 al 27 de octubre se hace reflexión disciplinada, 26 de octubre principia la celebración de Samhain, 27 de octubre es día de confesión, 28 de octubre se hacen ritos de “bendición”, 29 de octubre es el día de ordenación, 30 de octubre se hacen bautismos, 31 de octubre el año nuevo satánico, 1º de noviembre es el día de los “sellos”, los días 2 al 9 de noviembre se celebran las “bodas”.Y nosotros ¿qué? No creo que muchos oren con tanta devoción, y mucho menos con tanto entendimiento de lo que hacen y por qué lo hacen. Claro que sabemos al revés y al derecho repetir el Padrenuestro, pero no es eso lo que Jesús quería de nosotros. El desea que sondeemos los tesoros, que “leamos entre los renglones” de este bosquejo. Sí, es un bosquejo que podemos usar cuando oramos. Es sólo un punto de partida a nuestra oración.Durante las próximas siete noches estaré tratando un aspecto del Padrenuestro. Al terminar les aseguro que van a comprender un poco más de lo que Jesús nos quiso decir cuando dijo: Vosotros, pues, oraréis así:El Sr. Tyndall escribió en su Biblia “Dios no nos enseñó a predicar; no nos enseñó a cantar; nos enseñó a orar”.Nos enseñó a orar así: Padre nuestro que estás en los cielos. . .El tesoro de la paternidad de Dios y nuestra ciudadanía celestialTexto: Mateo 6:9ª1. Dios nos da el privilegio de llamarle así (Juan 1:12, 13) A. Como Padre, preparó todo para el bienestar de sus hijos. a. Desde antes de la fundación del mundo (1ª Pedro 1:17-20) Así como el padre se prepara cuando va a llegar un nuevo bebé a su hogar; así preparó Dios desde antes de la fundación del mundo el medio por el cual podríamos acercarnos a Él. . . Abba Padre (Romanos 8:15) b. Provee un medio de reconciliación después de haberle defraudado (Génesis 3:15) Se *****ple este plan en la crucifixión de Cristo. Vayamos pues hasta el lugar de la Calavera. Allí esta pendiente de un madero el Unigénito de Dios. No piense en el cuadro como lo pintan. Este Hijo de Dios fue vituperado de una forma atroz. Fue injusto el juicio que le hicieron. No había dormido, comido o bebido agua por más de un día. Fue azotado, y el látigo no era sólo de cuero, sino que tenía pedazos de hierro; así que al golpearlo, le quitaban la carne de sus espaldas. Lo bofetearon, por lo tanto estaba hinchado. La sacaron su barba a jalones, imagínese tal dolor. Le pusieron una corona de espinas en su frente; tenía la cara llena de sangre. Le quitaron su ropa, y no piense que le dejaron un lienzo para cubrir su vergüenza, no, estaba completamente desnudo. . . Imagínese el cuadro del Calvario. Esto costó el poder llamarle a Dios “Padre” y más que sólo Padre; le podemos llamar “Querido Papito” (Abba Padre). Nos podemos acercar a Él con esa familiaridad como se acerca uno a un padre amoroso y tierno. Por eso, cuando ore y diga “Padre me acerco a ti”. . . lo hace por méritos de su Hijo. Padre nuestro. . . B. Como Padre, nos ofrece un hogar. a. En Juan 14:2 Jesús nos da por sentado que hay muchas moradas en la casa de su Padre. Pero, lo más hermoso es que en esa casa no echa de manos no habrá llanto, sufrir, pecado ni enfermedad. Sólo habrá paz y actividad sana y estaremos glorificando a Dios siempre. (Capítulo 21 de Apocalipsis). Padre nuestro. . .2. Establece el círculo de la hermandad A. Tenemos un hermano mayor (Romanos 8:29) que fue hasta la cruz por ti y por mí (Hebreos 2:11). No se avergüenza de nosotros (Marcos 3:34, 35). Y este hermano mayor intercede por nosotros (Hebreos 7:25). Nos ama mucho más de lo que palabras pueden expresar. Padre NUESTRO. . . B. Nos hace partícipes de la herencia del Hijo legítimo (Tito 3:7; Romanos 8:17; Gálatas 4:6, 7; Hebreos 1:14; 6:17). Somos dueños de TODO. Todo lo que usted pueda imaginarse, de eso es dueño. ¡Somos hijos de un Rey! Padre nuestro. . .que estas en los cielos. . .3. Establece la localidad de su Reino A. El Padre es ciudadano del cielo, nos hace ciudadanos del cielo (Salmo 11:4; Isaías 66:1; Hechos 7:49) B. Si somos ciudadanos del cielo, tenemos los derechos de allí (Filipenses 3:20). Seremos reyes y sacerdotes (1ª Pedro 2:9) durante el milenio. C. Si somos ciudadanos del cielo, tenemos las responsabilidades de allí (2ª Pedro 1:10, 11). Guardemos nuestra ciudadanía, no sea que la perdamos. También es nuestra la responsabilidad de que no seamos tropiezo (2ª Corintios 3:2, 3). Esto nos será fácil si dependemos de Dios para *****plir como embajadores de nuestra patria (Hebreos 12:1)Padre nuestro que estás en los cielos. . . Por fe decimos ‘Padre’ y por amor decimos ‘nuestro’.Ahora cuando comience su oración tendrá un conocimiento más profundo de lo que dice. Nunca más leerá igual este ejemplo de la oración que Jesús nos dejó. Aún nos quedan más tesoros del Padrenuestro. Estos dos son un buen principio, ¿verdad?Oremos.